Sendero de Afur a Taganana, etnografía y naturaleza en Anaga

En pleno macizo de Anaga encontramos una preciosa ruta de senderismo que nos permite hacer un viaje a los orígenes de Tenerife. El sendero de Afur a Taganana nos acerca a una zona tan remota como llena de sorpresas. Montañas, playas salvajes y barrancos milenarios son motivos más que suficientes para animarse a caminar por esta zona de la isla.

El inicio del camino coincide con el caserío de Afur, continúa hasta la Playa de Tamadiste, bordea el pueblo de Taganana y regresa hasta Afur nuevamente. En total se cubren 14 km. de distancia en unas 6 horas aproximadamente. Éste es uno de los senderos circulares recomendados en Anaga.

Vista de la costa durante el sendero de Afur a Taganana

El macizo de Anaga, una maravilla natural en Tenerife

El macizo de Anaga se localiza en la vertiente nordeste de Tenerife y gran parte de su área forma parte del Parque Rural de Anaga. Su valor etnográfico es incalculable, también el ecológico pues se trata del lugar de Europa que cuenta con mayor cantidad de endemismos.

Toda la zona es un conjunto de profundos valles plagados de preciosos senderos que permiten descubrir una de las zonas rurales más destacadas en Tenerife. Caseríos ajenos al paso del tiempo, a la evolución y a la tecnología. Lugares que parecen mantenerse anclados en un modo de vida totalmente rural.

Pueblo de Afur en Anaga

Sendero de Afur a Taganana

La elevada altitud y estar situado en el paso de los vientos Alisos, convierten al macizo de Anaga en un lugar bastante húmedo. Por ello, para cualquier visita a la zona siempre es recomendable llevar chubasquero o algo de abrigo. Anaga posee un generoso clima que favorece la existencia y permanencia del bosque de laurisilva.

El bosque de Lausisilva es un fósil viviente. Un tipo de vegetación de la época Terciaria que se mantiene casi como en sus orígenes gracias al clima y la conocida como lluvia horizontal, un fenómeno meteorológico que se produce cuando las nubes chocan con el escarpado relieve humedeciendo terreno y vegetación. No se trata de lluvia propiamente dicha si no de un aporte de humedad al terreno y a los acuíferos de las islas.

Geología del sendero de Afur a Taganana

Sendero de Afur a Taganana, ruta circular recomendada

El caserío de Afur en Anaga

Afur es uno de los numerosos caseríos existentes en el macizo de Anaga. Hoy en día está habitado por poco más de 70 personas por lo que se trata de una zona muy tranquila. El poblado adopta su nombre de un vocablo guanche cuyo significado se traduce como horno o carbonera.

En este pequeño pueblo perdido entre grandes depresiones da inicio el sendero de Afur a Taganana (pasando por la playa de Tamadiste) sorteando algunos barrancos moldeados caprichosamente por el agua y el viento durante miles de años. Una visita más que recomendable si te aventuras a perderte por esa otra parte de Tenerife que recomendamos conocer.

Iglesia de Afur

Señal al inicio del sendero de Afur a Taganana

En el caserío de Afur encontramos una amplia zona de aparcamiento justo a los pies de la ermita de San Pedro. Es ahí donde, sobre las 10:00 hrs, comenzamos la ruta siguiendo el sendero PR-TF 8 hacia la playa de Tamadiste. Una de las numerosas playas salvajes de la costa norte de la isla.

Hablando de playas salvajes, si esta ruta de senderismo te parece demasiado exigente (son unos 14 km.) no te preocupes, hay otras playas en Anaga que puedes visitar en coche y sin necesidad de caminar demasiado. De hecho, es posible combinar en un mismo día lo mejor que ver en Anaga, es decir, un poco de naturaleza, otro poco de buena comida y un poco de playa (haz clic en el enlace anterior).

Barranco de Afur en Anaga

Camino por el barranco de Afur hasta la playa de Tamadiste

El sendero hacia la playa de Tamadiste se encuentra bien señalizado y gran parte del mismo es en suave descenso. A los pocos metros de haber comenzado tropezamos con un pastor. Braulio es seguido por su rebaño de cabras recordándonos que la ganadería en Anaga es una de las actividades tradicionales.

No hace tanto tiempo, los cabreros mayores usaban un palo para desplazarse entre barrancos y riscos, una actividad conocida como el “Salto del Pastor”. Una herencia transmitida de adultos a niños cuyo origen está en la forma de desplazamiento entre barrancos de los antiguos aborígenes de la isla.

Sendero desde Afur a Tamadiste

Tras despedirnos de Braulio continuamos el descenso cruzando el barranco de Afur. En este barranco el agua es la gran protagonista durante gran parte del año. Si, como nosotros, te aventuras a caminar por los principales senderos de Tenerife tras unos días de lluvias podrás disfrutar de barrancos con caudal suficiente para darle al lugar una sensación realmente especial.

Intuimos el lejano balido de las cabras en lo alto de una de las crestas del barranco, observamos casas esculpidas en cuevas y el silencio solo roto por el surcar del agua hacen que se despierten todos los sentidos. Esos mismos sentidos que en la ciudad desaparecen casi por completo.

Vegetación en el barranco de Afur

Costa de Anaga desde el barranco de Afur

La existencia de agua, recurso indispensable para la vida y la agricultura, ha explicado en muchas ocasiones la ubicación de los asentamientos humanos, incluso en zonas tan remotas como la que recorremos. El Menceyato de Anaga tal vez no fuera de los más importantes de Tenerife pero, sin duda, contaba con recursos muy necesarios para su desarrollo antes de la llegada de Alonso Fernandez de Lugo, el conquistador castellano. 

Tras una pequeña cuesta observamos el mar a los lejos. Pocas cosas son tan gratificantes como escuchar y observar el mar durante una ruta de senderismo. La playa de Tamadiste está cerca y nuestro camino sigue atravesando pequeños caudales de agua rodeados de abundante vegetación. Entre ella destacan los endemismos canarios del cardón (Euphorbia canariensis) y la tabaiba (Euphorbia lamarckii), ejemplos de sabinas, aneas, juncos y sauces canarios.

Sendero hacia la costa de Tamadiste

Charcos en el barranco de Afur

Charco de la Pasada y las Anguilas

A pocos metros de alcanzar la playa encontramos el famoso charco de la Pasada, un pequeño salto de agua tras el que se forma una balsa de agua. Se cuenta que en este lugar se pescaban anguilas, un pez capaz de nadar kilómetros en busca de agua dulce, donde mayoritariamente habita durante su vida, y que regresa al mar solo para reproducirse.

No hay rastro de las anguilas pero sí que observamos algunas ranas. Esta especie es poco abundante en Tenerife y se encuentran representadas por dos familias introducidas, la rana verde común (Pelophylax perezi) y la rana meridional (Hyla meridionalis). Identificamos la rana común, una especie que suele vivir en zonas húmedas con buena cobertura vegetal.

Charco de las anguilas en Anaga

Rana en las charcas de Afur

Tras poco más de 1 hora de caminata alcanzamos la playa de Tamadiste, caracterizada por sus grandes piedras y por una arena tan negra que nos recuerda que Tenerife es isla volcánica. Esta playa rara vez resulta apta para un chapuzón seguro pues las corrientes suelen ser bastante fuertes, así que hay que tener cuidado pues el baño tras la caminata de Afur apetece, y mucho.

En la misma playa encontramos una pequeña casa de piedra, cerrada y con signos de abandono. El lugar en conjunto es digno de postal y resulta magnífico para una parada antes de continuar el sendero rumbo a Taganana. Queda la mitad del recorrido por delante.

Playa de Tamadiste en Anaga

Parada en Tamadiste durante el sendero de Afur a Taganana

Camino desde Tamadiste a Taganana

Después de un agradable descanso en la playa de Tamadiste deshacemos unos metros el camino andado y regresamos a la que hemos denominado como “la piedra roja”. Allí se encuentra la señal hacia Taganana y por allí continua nuestra ruta cruzando el caserío de Los Auchones (o El Chorro).

Se podría regresar hasta Afur ascendiendo de nuevo el barranco, sin embargo, nuestra idea es realizar una ruta circular y, tras llegar a Taganana, continuar de regreso a Afur. El sendero de Afur a Taganana continúa sin opción a perderse además, no hay otra opción en nuestras mentes.

Señal hacia Taganana desde la playa de Tamadiste

Comienza aquí el ascenso, una de las partes más exigentes de la caminata pero una vez somos capaces de salvar el desnivel de la montaña que tenemos ante nosotros podemos disfrutar de una panorámica realmente espectacular. El ascenso es de menos de 20 minutos y tras la pausa en la playa nos pone de nuevo en marcha para continuar con ánimos renovados el trayecto.

La costa noreste de Tenerife es indomable, salvaje y virgen. Aparecen acantilados y pequeñas pero numerosas playas tratando de horadar las entrañas de Anaga. Un espectáculo natural que aún sería mayor minutos más tarde.

Costa norte de Tenerife

Mirador hacia los Roques de Anaga, espectáculo durante el sendero de Afur a Taganana

Nuestro ascenso continúa unos metros más. 3 pasos más pero no vemos nada, 2 pasos, se acerca el momento, 1 paso, ya estamos, estiramos el cuello como queriendo ver por encima del hombro del que va delante y ahí están: Los Roques de Anaga.

Se trata de uno de los monumentos naturales más emblemáticos de la isla. Los forman dos islotes, el Roque de Fuera y el Roque de Tierra. Uno más cercano a la costa, posee mayor tamaño y se encuentra unido a la costa. El Roque de Fuera se localiza a unos 800 metros del Roque de Tierra. Posee una forma alargada y desde la distancias parecen dos roques en lugar de uno.

Los Roques de Anaga también se pueden ver si haces la ruta desde Chamorga a Roque Bermejo (circular y recomendable)

Monolito en Anaga

Llegada a Taganana

Caserío de Los Auchones (o El Chorro) en Anaga

Continuamos cruzando el caserío de Los Auchones, un pequeño poblado asentado en las laderas de Los Auchones. Un enclave muy pintoresco íntimamente relacionado con la cultura del vino. Tanto es así que se comenta que un vino de Anaga tiene conquistado a Obama noticia de la que se han hecho eco algunos diarios de Tenerife. Además de viñedos encontramos plantaciones de papa, calabazas, bubangos … pero la vid destaca por tradición y cultura social.

Antiguamente las bodegas estaban todas en la costa ya que la inexistencia de carreteras hacía más sencillo sacar el vino en barcos principalmente por la playa de Roque de las Bodegas. Actualmente podemos encontrar algunas bodegas en esta zona, pequeñas, para el autoconsumo. En Los Auchones contamos hasta seis lagares realizados en tosca y situados próximos a las viñas.

Caserío de Los Auchones

Pueblo de Taganana y vuelta hacia Afur

Tras cruzar el caserío de Los Auchones llegamos hasta el pueblo de Taganana, el más importante de Anaga. Un pueblo histórico y especialmente conocido por ser un bello ejemplo de arquitectura tradicional canaria además de por albergar en el interior de la iglesia de Nuestra Señora de las Nieves un tríptico flamenco del siglo XVI. Una obra de arte.

Descender al centro histórico de Taganana suponía sumarle un par de horas más a nuestro día así que decidimos continuar con el plan inicial y dirigirnos de vuelta hacia Afur pues aún nos quedaban unas dos horas de recorrido (incluido un tramo bastante cuesta arriba).

Señales hacia la cumbre

Llegada a la cumbre de Anaga y final del sendero de Afur a Taganana

Encontramos dos carteles que nos señalaban el camino hacia La Cumbrilla/Afur y Casa Forestal/Las Vueltas. Mirar hacia la cumbre y ver el desnivel que teníamos que salvar nos quitaba las ganas de seguir a pie pero paso a paso comenzamos nuestro ascenso rumbo a la Degollada de la Cumbrilla. Tras cruzar pequeñas casitas nos adentramos en el bosque de laurisilva para, en lo alto, llegar a un cruce de senderos.

Hacia atrás rumbo a Taganana (de donde procedemos) siguiendo a la derecha rumbo a Afur (nuestro destino) por el camino de Enchirés. Ya lo peor había pasado. Iniciamos el descenso entre algunas casas y pistas de cemento hasta llegar a la carretera TF-136, desde allí (bordeando la misma) regresamos hasta el centro del caserío de Afur. Casi a las 16:00 hrs. nos sentamos en el único bar que encontramos abierto. Objetivo conseguido. Fantástica ruta circular completada durante este sendero de Afur a Taganana.

Sendero de Afur a Taganana

Cómo llegar al inicio del sendero de Afur a Taganana

La mejor manera de llegar al caserío de Afur es con coche particular pues el transporte público es intermitente. Para ello debemos llegar al término municipal de La Laguna y dirigirnos al monte de Las Mercedes.

A continuación, seguir las señales rumbo a Afur tomando la carretera TF-136. También se puede llegar en transporte público desde La Laguna tomando la guagua 076 en el Intercambiador de la ciudad pero ojo con los horarios de las guaguas de vuelta.

Sendero de Afur a Taganana

Como ves, Tenerife es una isla para recorrer por libre pero hay ciertas actividades que recomendamos reservar y para las cuales te vendrá bien tener un coche de alquiler. A continuación algunos ejemplos 

Más info sobre la isla de Tenerife

Si te han gustado nuestras recomendaciones sobre el sendero de Afur a Taganana tal vez pudieran interesarte estas otras visitas y actividades en Tenerife (incluye recomendaciones sobre hoteles y apartamentos). Haz clic sobre cada ruta para ir directamente a la información deseada.

Mejor Tenerife

      2 Respuestas a “Sendero de Afur a Taganana, etnografía y naturaleza en Anaga”

      Deja un comentario

      Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

      Suscríbete a nuestra newsletter

      Regístrate para recibir todas las novedades de La Gaveta Voladora